Esteban Guerrero Santos
Hace casi un
año, el 28 de abril del 2014, Alfonso
Cuarón ganador del Óscar como Mejor
Director por Gravity cuestionaba a Enrique Peña Nieto, sobre la reforma
energética y sus afectaciones al medio ambiente, así como de la corrupción
dentro del sindicato de Pemex. En una carta pública enlistaba 10 preguntas donde solicitaba en su
calidad de ciudadano y con independencia política se le informara acerca “el
sentido y alcance de la reforma” de la iniciativa de ley al sector energético
promulgada en diciembre del 2013 y remataba diciéndole a Peña: “Dos experiencias desastrosas permanecen en
la memoria de los mexicanos: la quiebra de 1982 (luego del dispendio, la
ineptitud y la corrupción que caracterizó el manejo de la riqueza petrolera de
los años setenta) y las reformas discrecionales y opacas de tiempos de Salinas
de Gortari, buenas para las manos privadas pero dudosas para los consumidores.
¿Qué nos garantiza que esas experiencias, que han ahondado los abismos
sociales, no se repitan? Usted y su partido cargan con la responsabilidad
histórica de estas reformas. ¿Cree realmente que el Estado mexicano tiene los
instrumentos para llevarlas a cabo con eficacia, sentido social y
transparencia?”
La respuesta
tardo en llegar, con una referencia que ninguneaba los cuestionamientos, en una
entrevista que Peña le concedió al periodista de Univisión, León Krauze: "Creo que sobre las reformas que se han
suscitado en México no han faltado los grupos que en oposición a estas reformas,
han generado desinformación y de ahí que algunos lleguen a comprar, o con
insuficiente información, simplemente no conozcan el alcance y el sentido de
las reformas. Las reformas que son reconocidas en el mundo, porque saben
que la instrumentación de estas reformas permitirán que México crezca
económicamente y tenga mejores condiciones sociales". ¿Así o más
claro?
Este fin de semana, en el marco de la entrega
de la edición 87 de los Premios de la Academia, otro Director mexicano igual de
“desinformado”: Alejandro González
Iñárritu, aprovechó la tribuna y lanzó dentro de sus agradecimientos un
breve discurso que ha causado polémica a ambos lados de la frontera: “Dedico este premio a mis compañeros
mexicanos que viven en México. Rezo porque podamos encontrar y construir el
gobierno que deseamos”. “A los
mexicanos que viven en este país (Estados Unidos), que son parte de una nueva
generación de migrantes, rezo porque puedan ser tratados con la misma dignidad
y respeto que recibieron aquellos que llegaron antes y poder continuar construyendo esta
increíble nación de migrantes”.
Como estamos en
tiempos de elecciones la respuesta de “El Pájaro Nalgón” fue un slogan lleno de
lugares comunes, pleno de entusiasmo, que no distinguimos si es burla cínica o
de veras está tan mal, que hasta se cree su realidad virtual. “Como país, nos enorgullece saber que
mexicanos pueden triunfar, descollar, tener éxito, aquí y fuera de México,
porque como gobierno, hoy nos ocupa precisamente, sembrar las mejores
condiciones, trabajar porque nuestro país tenga los mejores espacios, para que
cada individuo pueda escribir sus historias personales de éxito, para que cada
individuo pueda encontrar los espacios idóneos y óptimos para construir un
sendero de triunfo y de realización personal", mientras que sus testaferros del PRI se masturbaban escribiendo
en twitter: “Coincidiendo en el
orgullo mexicano, es un hecho que más que merecerlo, estamos construyendo un
mejor gobierno. Felicidades #GonzálezIñárritu”.
Para acabarla, el
día de ayer Peña Nieto entregó el Premio Internacional Carlos Fuentes a la
Creación Literaria en el Idioma Español al escritor Sergio Ramírez, no obstante, cabe recordar la
pobre opinión que Fuentes tenia del entonces candidato y que manifestó en una
entrevista a la BBC antes de morir, definiéndolo de cuerpo completo
con un: “Peña Nieto, es un hombre de muy
escasos recursos intelectuales y políticos” para después sentenciar: “tiene derecho a no leerme, pero que de lo que
no tiene derecho “es a ser Presidente de México a partir de la ignorancia, eso
es lo grave”.
