El derecho de huelga no se negocia
Al
STUNAM, que se formo, consolidó y fue reconocido gracias a una huelga que
estalló en junio-julio de 1977, siempre le ha quedado claro y que forma parte
de uno los principios estatutarios básicos que le dan vida, que: “El derecho de
huelga no se negocia se ejerce”.
Es por esta razón
que saludamos el acuerdo a que llegaron hace unos días, en el seno de la
Organización Internacional del Trabajo (OIT), los representantes de los
trabajadores y de los patrones, en el sentido de que sea ratificado y
reconocido “el derecho a emprender acciones industriales, apoyado por el
reconocimiento explícito por parte de los Gobiernos del derecho a la huelga,
vinculado al Convenio No. 87 de la OIT sobre la libertad sindical”. Este
acuerdo se adopto a los pocos días de que a nivel mundial se llevó a cabo, al
abrigo de la Confederación Sindical Internacional (CSI) y de la Confederación
Sindical de las Américas (CSA), una movilización del movimiento sindical
internacional el 18 de febrero de 2015, que tuvo un éxito enorme, registrándose
más de 100 acciones en cerca de 60 países en apoyo al derecho de huelga;
actividad que recordemos, el STUNAM y la UNT desarrollamos en Ciudad
Universitaria.
Con el acto
llevado a cabo en la OIT, se ha dado un importante avance, dejando atrás dos
años en que la representación de los empresarios, fundamentalmente europea,
“ocasionara una parálisis del sistema de control global de esa agencia de la
ONU, en una tentativa para eliminar toda una historia de jurisprudencia de la
OIT que apoya el derecho de huelga” (CSI, 26 de febrero de 2015).
Este sin duda es
un gran triunfo del movimiento sindical internacional y fue producto de
acciones globales de masas llevadas a cabo por el sindicalismo y que dieron
frutos concretos con el resoluto de la OIT, ratificando los planteamientos de
que la solidaridad internacional es un arma adecuada para apoyar las causas
geniales y particulares de los trabajadores.
Ahora, seguiremos
denunciando las intenciones del Senado de la República, en el sentido de que
desde ahí se pretenda golpear a los trabajadores de empresas autónomas y
descentralizadas de la Ciudad de México, a los que intentan pasar del Apartado
A al Apartado B del 123 constitucional, lo que significaría, si se concretara
su aprobación, que estos trabajadores en automático perderían su derecho a la
huelga y a la contratación colectiva, con lo cual los senadores estarían
violando lo auspiciado desde la OIT. Los legisladores mexicanos deben reflexionar
y no pasar de contrabando, dentro de la ley que le dará personalidad jurídica
al DF, una legislación laboral que viola tratados internacionales, a los
cuales por cierto México en varias ocasiones ha ratificado en la OIT.
No hay comentarios:
Publicar un comentario